El pasado viernes 10 de abril se celebró en el IES San Isidro, en pleno centro de Madrid, la presentación de Sombras de la Plaza Mayor, la nueva novela de Rosa Huertas. A la autora la presentaron la directora del instituto y un profesor de Lengua y Literatura de un instituto de Cartagena, amigo de la autora.
La presentación comenzó recalcando la importancia del emblemático espacio. Por el IES San Isidro han pasado numerosas personalidades del mundo literario: Benavente, los hermanos Machado, Calderón de la Barca o Vicente Aleixandre son solo algunos de los autores que pisaron sus aulas. Además, el centro se menciona en esta novela, donde confluyen personajes que ya vimos en Tuerto, maldito y enamorado, una obra anterior de la autora que tomaba como ambientación el lugar.
La escritora comenzó la presentación hablando de cómo se le ocurrió la idea para este libro. Los asistentes supimos que la historia nació como una idea para una colección dirigida por Sara Moreno, que tiene como temática su dedicación a lugares emblemáticos de Madrid. Rosa, que vive cerca de la Plaza Mayor, tiene un cariño especial por este lugar y quiso dedicarle esta obra. También nos contó que fue su amigo Fernando Marías quien le dio la idea para comenzar la novela, ya que le aconsejó que si quería contemplar la Plaza Mayor para inspirarse, el mejor momento para hacerlo sería de noche, cuando no estuviera plagada de turistas, y pudiera encontrar personajes potenciales en las sombras.
Rosa Huertas, que es gran conocedora de Madrid, contó algunas anécdotas sobre el proceso de documentación de la novela. Entre ellas, habló de la estatua ecuestre de Felipe III que está en el centro de la Plaza. Describió divertida cómo la estatua, en un primer momento, tenía una abertura en la boca, por lo que los pájaros se colaban por el orificio y no podían salir. Durante la Guerra Civil, explotaron el caballo con una granada y se cuenta que la Plaza se llenó de plumas por todos los pájaros que habían quedado atrapados.
Su presentador se quejaba de los finales tan abiertos que tienen siempre sus novelas, y la autora los justificó diciendo que no quiere transmitir a los jóvenes la idea errónea de que uno encontrará el amor de su vida a esa edad y que no podrá tener más relaciones. Dijo que disfruta contando sus historias y que estas abarcan una parte de la vida de los personajes: la que quiere contar.
Rosa mostró su intención de escribir un tercer libro que cerrara esta trilogía que, aunque narra historias independientes, toma como punto de unión el instituto.
Al dar por terminada la presentación, la autora estuvo firmando libros en este escenario en el que el pasado y el presente se juntan.
Este miércoles 8 de abril ha tenido lugar la entrega de la tercera edición del Premio Literario ?La Caixa? / Plataforma. La ganadora ha sido la madrileña Clara Cortés, que a sus 18 años verá publicada su obra Al final de la calle 118 por el sello Plataforma Neo en mayo de este año. El jurado ha decidido otorgar un premio extraordinario a la escritora Alba Quintas por La chica del león negro, que llegará a librerías en junio.
El evento ha estado conducido por Jaume Giró, director general de La Caixa, Jordi Nadal, director de Plataforma Editorial, y Luis Alberto de Cuenca, reconocido poeta y humanista. Desde La Caixa han insistido en su compromiso con los jóvenes y en la importancia de este Premio.
Al final de la calle 118 es la primera obra publicada de Clara Cortés. En ella narra la difícil relación entre Valeria y su hermana mayor, Raven. Su madre las abandonó seis años atrás, por lo que Valeria intenta abrirse camino como modelo, mientras su hermana ejerce la prostitución para mantener a ambas. Pero cuando el joven Simon entra en sus vidas, una serie de coincidencias y sucesos provocará un cambio en los destinos de los personajes.
El jurado, compuesto por Nadal y el escritor Francesc Miralles, destaca la obra ganadora por ser «un drama inteligente, delicado y real que demuestra que las segundas oportunidades siempre son posibles». El propio Luis Alberto de Cuenca confesó haber disfrutado y llorado durante la lectura de la obra.
Alba Quintas, que ya ganó el Premio Jordi Sierra i Fabra en 2012, ha recibido un premio extraordinario por decisión del jurado. En La chica del león negro guía al lector por Némesis, un mundo fantástico gobernado por los horrores de la mente humana, donde encontraremos la depresión, la rabia o la melancolía en forma de personajes y paisajes. Serena, su protagonista, salta de nuestro mundo a este para buscar una cura a la enfermedad de su novio Pascal.
El Premio tiene una dotación de 3.000 euros y ha recibido 199 novelas procedentes de diez países distintos y escritas por jóvenes entre 14 y 25 años en lengua castellana y catalana.
Desde El Templo queremos dar nuestra enhorabuena a Alba y Clara.
El pasado martes 24, Fnac Callao abría sus puertas para recibir a Holly Smale y su nuevo libro, Geek girl. Ambos han tenido muy buena acogida tanto en Inglaterra, de dónde provienen, como internacionalmente, de modo que no es de extrañar que la sala estuviese llena. Además de la cantidad de público, a Smale la acompañaron las editoras de Destino y la youtuber María Cadepe.
Entre las tres nos descubrieron una novela, Geek girl, protagonizada por el personaje de Harriet Manners. Ella nunca ha llegado a encajar entre la gente de su instituto, aunque sí tiene una mejor amiga, Natasha. Un día verán pasar la oportunidad de sus vidas, trabajar para una agencia de modelos, una idea que a Nat le entusiasma, pero a Harriet en absoluto. ¿Qué pasará entonces cuando el sueño de su mejor amiga se convierta en la realidad de Harriet? ¿Conseguirá al menos ser alguien popular entre sus compañeros de instituto? ¿O será solo más desprecio (esta vez el del mundo de la moda) lo único que conseguirá?
Pero en la presentación no solo se habló del libro, sino también de la tarea de Holly como escritora, o de su manera de enfrentarse a la fama. Sin embargo, si hubo algún tema de especial relevancia, ese fue el del pasado de la autora. Esta contó que, en parte, Geek girl está basado en experiencias propias, ya que en el instituto ella también sufrió bullying por parte de una compañera. Además, al igual que la protagonista de la novela, la autora se convirtió en modelo, y ha tomado su experiencia como referente para escribir sus historias.
Holly Smale también comentó que si había algo que la hacía especial ilusión era el hecho de que muchos jóvenes se acercasen en sus eventos a agradecerle la ayuda que, sin saberlo, les había brindado a través de sus novelas.
Por último, y después de un turno de preguntas, la autora firmó ejemplares de la novela y se hizo fotos con los asistentes acompañada de un gracioso photocall y de merchandising a juego con la portada del libro.