Si todavía no conoces a Percy Jackson, te contaremos que hasta hace un par de años no era más que un chaval normal, con ciertos problemas de dislexia que le hacían la vida en el colegio un poco más complicada de lo que ya era. Sin embargo, hace dos veranos descubrió algo asombroso: los antiguos dioses griegos, los moradores del Olimpo, continúan existiendo en pleno siglo XXI... Y eso no es lo más sorprendente: Percy es hijo de uno de ellos. Así, en El ladrón de rayo, la primera entrega de la serie, Percy descubría todo un mundo de seres mitológicos, acudía al Campamento Mestizo para formarse como héroe y trataba de averiguar quién le había robado el rayo maestro a Zeus, mientras que en el segundo libro, El Mar de los Monstruos, emprendía una épica aventura en busca del Vellocino de Oro. Y entretanto iba creciendo como héroe y como persona e intimando con sus nuevos amigos: Grover, el sátiro, y las dos jóvenes mestizas Annabeth y Thalia.
En La maldición del titán nos encontramos a un Percy de catorce años que empieza a sentir algo especial por su amiga Annabeth; sin embargo, la intervención de la diosa Artemisa y sus Cazadoras, entre las que destaca Zoë, puede echarlo todo a perder. Durante una misión en apariencia rutinaria (escoltar hasta el Campamento Mestizo a Nico y Bianca, dos hermanos cuyos orígenes podrían ser también semidivinos), el grupo sufre un ataque y Annabeth es secuestrada. Pero en el Campamento Mestizo tienen otros problemas: también Artemisa ha desaparecido, y es fundamental encontrarla antes de que los dioses se reúnan de nuevo y tomen una decisión sobre la guerra que se avecina; por otro lado, el Oráculo vuelve a inquietarlos con una de sus terribles profecías, y con todo esto, a nadie parece preocuparle la situación de Annabeth. Pero Percy no se da por vencido; junto con Grover, Thalia, Zoë y Bianca emprende la búsqueda de ambas, diosa y mestiza, mientras los titanes van despertando, uno a uno, para unirse al bando que desafiará a los Olímpicos en la batalla final. ¿Lograrán llegar hasta Artemisa… y hasta Annabeth… a tiempo? ¿Y a qué precio?
Esta nueva entrega de la serie de Percy Jackson es igual de emocionante que las anteriores, o incluso más. Porque, junto a la trama específica de la novela, también la trama general de la saga va cobrando cada vez más protagonismo, los lazos entre los personajes se estrechan y vamos averiguando más cosas acerca de su pasado. En La maldición del titán conoceremos a nuevos dioses (como Apolo, Artemisa, Afrodita o incluso Atenea, la madre de Annabeth) y criaturas mitológicas. Encontraremos momentos llenos de humor, de acción y de aventura, como en las anteriores entregas, pero también escenas de profunda emoción y sentimientos a flor de piel, además de que nos dejará mordiéndonos las uñas ante las incógnitas que plantea el final: ¿qué hará Nico ahora? ¿Qué ha sido de Luke? ¿Qué pasará entre Annabeth y Percy? ¿Logrará Grover encontrar al dios fauno perdido? Con todos estos interrogantes, no podemos esperar a la siguiente entrega, que en Estados Unidos ya ha sido publicada y que se titula The Battle of the Labyrinth; sin embargo, no vamos muy atrasados con respecto a los lectores anglosajones, que aguardan el lanzamiento del último título de la saga, The last Olympian, para el próximo mes de mayo.
En resumen, Percy Jackson y los dioses del Olimpo es una serie muy recomendable; pese a algunos detalles que nos recuerdan a otras sagas (la sombra de Potter es alargada), el mérito de su autor, Rick Riordan, está en actualizar la mitología griega, cuyas historias y personajes siguen teniendo la misma fuerza evocadora de entonces, y construir con ellos una trama llena de acción y aventura que no aburre en ningún momento. En castellano es Salamandra quien se encarga de publicar estos libros, manteniendo las cubiertas originales; pero, tras editar los dos primeros en tapa dura, La maldición del titán sale directamente en rústica. Una buena noticia para nuestros bolsillos, pero un fastidio para los que seguimos la serie y ya teníamos los títulos anteriores en otro formato. ¿Será cosa de la crisis?
En cualquier caso, parece ser que vamos a tener héroes, dioses, monstruos y titanes para rato, y no solamente por la publicación de los libros que faltan: 20th Century Fox ha comprado los derechos de la saga para su adaptación al cine. ¡Por las barbas de Zeus!