Zanna y Deeba son londinenses normales y corrientes… o al menos lo eran. Hace poco tiempo, sucesos extraños empezaron a acosarlas: atípicas reacciones de animales, personas entregándoles peculiares cartas, nubes con la forma de sus rostros; incluso una niebla oscura se cernió sobre ellas y sus amigas, provocando un accidente de coche.
Pero el colofón de todo esto llega cuando, durante la noche, ambas chicas descubren un paraguas roto que parece estar espiando el hogar de Zanna. A raíz de esto, ella y Deeba se verán conducidas en medio de la noche por los recovecos de Londres hasta llegar a lo que parece ser una copia de su ciudad, salvo que... está construida a partir de los deshechos de esta.
Con ayuda de variopintos personajes irán conociendo la verdad: que la ciudad donde se encuentran, Alondres, está repleta de los objetos que quedan inservibles en Londres. Además, sobre el lugar se cierne una amenaza cada vez más imponente y se ha profetizado que solo la Shuasí lograría hacerle frente.
Un lun dun es una historia poco corriente, eso sin duda. Desde los personajes que se esconden en sus páginas hasta la ambientación, todo resulta atípico, cuanto menos. La premisa, en un principio, es lo que podría sonarnos más familiar: una elegida para salvar un mundo del que hasta hacía minutos no tenía constancia.
Sin embargo, Miéville consigue resolver esto también, de manera que los giros argumentales nos den más de una sorpresa. Este suspense, sumado al estilo extremadamente sencillo del autor, contribuye a que el ritmo sea constantemente frenético.
Los personajes, en cambio, pese a ser divertidos y buenos conductores de la trama, resultan algo planos y lineales, con escaso desarrollo a lo largo del relato. Sin embargo, el libro, desde el principio, marca las pautas de una historia repleta de acción y heroicidad que no requiere de personajes cuidadosamente construidos para mantener la intriga del lector.
La historia resultante combina aventuras, misterio y una pizca de magia, así como una gran variedad de personajes y una elaborada ambientación. ¡Adéntrate en ella si ese es tu destino! O si todavía no has aprendido que no necesitas de él para hacer grandes cosas.