«Las lluvias de primavera llegan sin avisar y crean el caos, pero luego lo dejan todo más brillante y lozano». Esa es una de las primeras lecciones que Chun Yu aprende al poco de mudarse con su tío, tras quedarse huerfana. Su tío la trata bien y se preocupa por ella, pero uno de los chicos del pueblo, Wong el Tigre, hijo del recaudador, no la deja en paz. Insiste en casarse con ella pese a que Chun Yu no sienta ningún interés por el matrimonio ni por él. Por otro lado, Shu Mei es una monja guerrera que ha sobrevivido al ataque contra el monasterio donde vivía. Al darse cuenta de que está sola, decide viajar hasta otra congregación donde pueda sentirse a salvo. Entre ambas protagonistas se formará un fuerte lazo de mentora y alumna que las hará descubrir que juntas son mucho más fuertes de lo que creen.
Este cómic juega con la gama de grises y la intensidad de la luz para detallarnos un precioso viaje de autodescubrimiento. Estos dibujos fluidos que se pueden ver en Lluvia de primavera imitan con gran maestría el estilo de las pinturas orientales hechas con tinta. El trabajo y el mimo detrás de cada una de las composiciones se nota en todas las páginas, y es imposible avanzar sin querer estudiar bien sus detalles. Es cierto que, al principio, el texto está muy concentrado en bocadillos de gran tamaño, lo que podría dificultar la lectura, pero no hay nada por lo que preocuparse: a lo largo del cómic, texto e imagen se equilibran para que podamos enten der la historia de las protagonistas sin que la parte escrita la entorpezca.
En cuanto a sus protagonistas, Shu Mei es una experta en artes marciales, específicamente del kung-fu, y se ofrece a enseñarle a Chun Yu para que esta pueda ganarse su libertad y no tenga que casarse con Wong. A primera vista, la monja resulta un personaje distante y digno, muy alejado de la realidad, pero según su trama avanza, se nos muestra su lado más humano, tanto por el apoyo a su aprendiz como por la ayuda que siempre está dispuesta a prestarle a cualquiera que la necesite. El arco de personaje de Chun Yu, en cambio, se basa en la lucha por la libertad individual y en demostrar su propia valía, sin que nadie tenga que hacerlo por ella. Ambas protagonistas se alimentan la una de la otra para mostrar una unión basada en la sororidad y la lucha personal.
Lluvia de primavera es un cómic corto, que no supera las 65 páginas, pero capaz de concentrar en ellas enseñanzas importantes, una historia interesante y unos personajes que te atraparán. Ambas protagonistas están listas para mostrarte el camino del kung-fu, si tú estás dispuesto a seguirlas.