Carol y Remo se están conociendo. Se escriben a diario, podrían charlar durante horas de cómo les ha ido el día y su relación se va volviendo cada vez más especial. A juzgar por los mensajes que intercambian, todo apunta a que los chicos van a acabar siendo algo más que amigos… si no fuera porque Carol y Remo solo se han visto una vez, en el aeropuerto, donde ella cogería un vuelo a Tokio y él, otro a Los Ángeles.
No obstante, ellos no van a permitir que la distancia se interponga entre la que podría ser la amistad más importante de sus vidas, y HeartBits les va a ayudar a combatir los kilómetros que los separan.
Latidos es la esperada segunda parte de Pulsaciones, un novela que cosechó un enorme éxito entre los lectores y que se caracteriza por estar escrita únicamente a través de mensajes de HeartBits, una app de mensajería instantánea muy parecida a nuestro WhatsApp.
Lo que más gustó de Pulsaciones fue la originalidad de su formato, que permitía una lectura que, a pesar de ser ágil y sencilla, no descuidaba otros aspectos importantes como la trama. En Latidos, los autores han conseguido aunar ese carácter de lectura ligera con una historia que funciona bien a muchos niveles.
Uno de esos niveles es el de los personajes. Los protagonistas de Latidos están mucho más perfilados que los de Pulsaciones: Remo y Carol tienen unas circunstancias personales muy distintas, y la manera en la que sus respectivos problemas les afectan se refleja en sus decisiones o en la manera en la que interactúan. Los mensajes de texto son el único medio del que dispone el lector para conocer la voz de los personajes, y los autores, conscientes de ello, han potenciado mucho más este aspecto en Latidos que en Pulsaciones. Así, llegamos a profundizar tanto en los personajes y en la realidad que los rodea que parece mentira que estemos ante una novela epistolar.
En términos de trama, Ruescas y Miralles han sabido sortear con destreza las dificultades que supone este carácter epistolar: Latidos tiene varias líneas argumentales, reflexiona sobre temas como las relaciones a distancia y aborda el conflicto amoroso de forma plausible.
Saca a la señora cotilla que todos llevamos dentro y ponte cómodo para husmear las conversaciones de Remo y Carol. Pronto descubrirás cómo cada mensaje tiene la capacidad de unirlos un poquito más… a pesar de que los separen más de diez mil kilómetros.