La familia de Susana lleva cuatro años cargando con el peso de la incertidumbre. ¿Dónde está ella, la primogénita, la adolescente alegre que un día bajó a por el pan y jamás regresó? Tras años de búsqueda, sin un rastro que seguir, sin ninguna pista, todos se han resignado a vivir con el dolor de su ausencia. Sin embargo, una noche, Susana entra en casa como si nada. Para ella no ha pasado el tiempo, apenas ha tardado unos minutos en volver. Los médicos, la policía, sus amigos y familia intentan que haga memoria..., pero nada. Su aparición solo hace del misterio algo más oscuro.
El largo regreso, la nueva novela del prolífico autor Jordi Sierra i Fabra, nos sumerge en un inquietante thriller que presenta una serie de personajes rotos por la desaparición de un ser querido. La historia no solo trata sobre un inspector que intenta arrojar luz sobre uno de los casos más mediáticos de los últimos tiempos, sino también sobre las consecuencias de una tragedia de estas características: los amores frustrados, las amistades en pausa y la infancia robada de la hermana pequeña.
Con sus menos de doscientas páginas y un ritmo vertiginoso, es fácil leer lanovela de una sentada. La tensión se mantiene hasta el último capítulo, en el que todas las tramas se resuelven con satisfacción, sin duda uno de los puntos fuertes del libro.
La brevedad no siempre trae ventajas. En ocasiones, se echa de menos mayor complejidad, más pistas, más dificultades a la hora de resolver lo que ocurrió el día que Susana desapareció y más desarrollo de los personajes. Da la sensación de que en esos casos el autor se esfuerza por ir directamente al grano, y más páginas habrían enriquecido esta historia.
Como el propio título nos indica, en El largo regreso acompañamos a Susana en su angustiosa vuelta a la vida que perdió cuatro años atrás. Da la impresión de que a Jordi Sierra i Fabra, uno de los escritores más célebres de la literatura juvenil española y ganador del Premio Lazarillo 2019, ningún género se le resiste.
¿Existen los misterios oscuros, o es todo mucho más sencillo?