Jugadores, preparaos para adentraros en Alstreim, una ciudad oscura y sin esperanza, a través de la tecnología de realidad virtual. En esta experiencia inmersiva interactuaréis con un elenco privilegiado de la talla de Monique Dumont o Garret Maddox, mientras reunís pistas y competís para ver quién resuelve primero el asesinato...
Toda Tesla está pendiente del inminente lanzamiento de la versión beta del Lady Marian, el videojuego que promete una verdadera revolución cultural. Lo que despierta el morbo y la consternación de muchos no es solo su formato, sino su objetivo principal: desvelar el misterio de la muerte de Marian, un personaje inspirado en la difunta esposa del director creativo de la compañía, Israel Valenty, que fue asesinada dos años atrás y cuya investigación sigue abierta a día de hoy.
Sophie no está particularmente interesada en el juego más allá de la admiración que pueda sentir como guionista, pero pronto descubrirá que Rasvan, su mejor amigo y actor que formaba parte de la experiencia, ha muerto, y la única forma de averiguar lo que ha ocurrido es, precisamente, adentrándose en el peligroso mundo de Alstreim para resolver el caso.
Alba Quintas nos demuestra una vez más su versatilidad con un thriller autoconclusivo que combina múltiples temas interesantes, como la salud mental, la soledad o la realidad virtual, con una historia y una ambientación adictivas. Lo único que no sorprende es su prosa, tan refinada y cuidada como de costumbre, que consigue elevar la narración y hacernos partícipes de lo que ocurre en las páginas como si fuéramos un personaje más.
En la trama de Lady Marian, Alba insufla vida a un mundo futurista, donde la línea que separa la realidad y la ficción se difumina conforme Sophie se va adentrando más y más en el terrible y a la vez encantador mundo de Alstreim. La historia está repleta de referencias al teatro, el método y la actuación, y su protagonista, una guionista y dramaturga controvertida por su pasado y sus obras, brilla por su cinismo, su carácter y su vulnerabilidad. La obra tiene un ritmo ágil y sus capítulos cortos consiguen mantener enganchado al lector, aunque peca de tener un final un tanto precipitado.
Si quieres averiguar más pistas sobre esta historia, no dudes en convertirte en uno de los jugadores de la versión beta. Pero cuidado, una vez te adentres en la oscuridad de Alstreim, puede que no quieras volver a ver la luz.