Melinda acaba de comenzar su primer año de instituto, pero no tiene ninguna amiga. Rachel lo era, pero después de lo que sucedió en la fiesta de verano no le dirige la palabra. Nadie lo hace, en realidad, porque ninguna persona quiere saber nada de la chica que llamó a la policía en mitad de una fiesta llena de menores bebiendo alcohol.

Desde entonces, Melinda apenas habla. Se devora los labios poco a poco, para callarse. No quiere recordar lo que pasó, pero a veces se cruza con ÉL por los pasillos. Es entonces cuando su cuerpo se congela y apenas puede reaccionar. Como aquella noche.

Laurie Halse Anderson publicó Cuando los árboles hablen, título con el que se tradujo Speak al castellano, en 1999. Veinte años después y con el movimiento #MeToo muy presente en la literatura juvenil, Cúpula publica Cuéntalo, la novela gráfica ilustrada por Emily Carroll. A través de unas imágenes hermosas, impactantes y llenas de metáforas, la ilustradora adapta la historia de Melinda a este nuevo formato con un resultado fantástico. Además, la novela ya está descatalogada en nuestro país, por lo que esta nueva versión es una forma perfecta de que los nuevos lectores puedan acceder a la historia.

Cuéntalo es una obra llena de fuerza y expresividad en sus imágenes, y con un argumento muy relevante, sobre todo en el momento actual. El viaje emocional de la protagonista está narrado como nos tiene acostumbrados la autora estadounidense: sin medias tintas, sin tratar a los jóvenes de forma naif o exponiendo el drama de forma morbosa. Desde la primera frase se sabe que lo que vamos a leer no es una obra fácil. Las ilustraciones aportan un impacto mayor a la historia y transforman con pericia los recursos narrativos en diferentes formas de dibujar, colorear y relacionar las viñetas. Cabe destacar que se ha mantenido el texto original (a excepción de algunas mínimas modificaciones) y, a pesar de la distancia con respecto a su momento de publicación, la historia de Halse Anderson sigue teniendo la misma fuerza.

Emily Carroll y Laurie Halse Anderson han cruzado sus carreras en una joya que merece la pena leer. La edición en castellano, además, tiene un formato perfecto para apreciar la belleza de las ilustraciones. Con un poco de suerte, alguna editorial reeditará la joya que sigue siendo Cuando los árboles hablen.