Isabel Salgado es una joven de veinte años, estudiante de Periodismo, que vive en Madrid en un piso con su amiga Sara. Hace tres meses, su padre desapareció sin dejar rastro. La policía ha intentado averiguar qué ha pasado, pero no han conseguido encontrarlo. Un día, Isabel recibe una triste llamada: su padre Luis se ha suicidado en el Museo del Prado.
El mismo día de la desaparición de su padre, una historiadora apareció muerta, y la policía tampoco ha conseguido solucionar ese caso. Marco, el hermano de la historiadora, contacta con Isabel para contarle que cree que hay algún tipo de conexión entre la muerte de su hermana y la de su padre, ya que en los análisis de ambas autopsias aparecen unas sustancias sospechosas que debían de haber tomado en contra de su voluntad. Marco relaciona esa muerte con antiguas leyendas, objetos míticos y un extraordinario poder que se oculta en El Escorial. Además, el padre de Isabel estaba investigando temas muy concretos y curiosos: los grimorios, libros antiguos de magia.
A partir de ese momento, la trama comienza a complicarse. En el libro encontrarás un misterio, una aventura, y objetos místicos como el sello de Salomón, el Necronomicón o el Arca de la Alianza. Rocío Rueda presta mucha atención a la historia, uno de los puntos fuertes de esta y otras de sus novelas. El libro tiene un ritmo ágil, la acción tiene lugar en diferentes lugares y la autora va describiendo cada uno de los movimientos de los personajes para que no nos perdamos siguiendo las pistas de esos asesinatos. Además, también describe con detalle la arquitectura de algunos edificios relevantes, como El Escorial, el Museo del Prado o el palacio de Carlos V en Granada.
Con la lectura de La boca del infierno conocerás algo más sobre los monarcas Carlos V y Felipe II y por qué este último mandó construir El Escorial; quizás la respuesta no es la que hemos estudiado todos siempre en el instituto.