La ciudad de Gotham está asolada por la delincuencia. A la cabeza están los Nightwalkers, una banda de criminales con un propósito claro: acabar con las grandes fortunas de la ciudad. Tal y como lo indica su distintivo símbolo: una moneda envuelta en llamas.
El huérfano Bruce Wayne es el siguiente de su lista. Tras su dieciocho cumpleaños heredará la fortuna de sus padres y pasará a convertirse en uno de los principales objetivos de los Nightwalkers, pero Bruce tiene muchas otras cosas en las que pensar, como el estrés que le provoca no poder tener la vida normal de cualquier otro adolescente. Los paparazzi no dejan de acosarle y no sabe del todo bien en quién de sus amigos puede confiar.
Por si esto fuera poco, las cosas no mejoran cuando decide abandonar impulsivamente su fiesta de cumpleaños, lo que le lleva a entrometerse en una de las misiones de la policía. Su castigo consistirá en realizar servicios comunitarios en la escalofriante Arkham Asylum, que da cobijo a los delincuentes más temidos. Entre ellos Madeleine Wallace, por quien Bruce pronto empezará a sentir una extraña atracción.
En Batman: Nightwalker, Marie Lu aporta su granito de arena al universo Batman contándonos la historia de Bruce Wayne, quien aún está lejos de convertirse en el superhéroe que todos conocemos. Esto le permite a la autora adentrarse en la formación del carácter de la persona tras el superhéroe. Para ello hace uso de un grupo diverso de personajes secundarios, entre los que destaca Madeleine, a quien decide utilizar inteligentemente tanto de villana como de interés amoroso. Es el choque entre el mundo de Bruce y el de Madeleine lo que da lugar a una serie de reflexiones que enriquecen tanto al protagonista como a la trama.
La novela tiene un desarrollo bastante prometedor y la autora mantiene un muy buen ritmo durante gran parte del libro, pero, lamentablemente, este se desinfla una vez llegado al clímax. Marie Lu cae en una serie de clichés y arcos que son incapaces de suplir lo innovador del resto de la historia. Todo esto hace de Batman: Nightwalker una lectura entretenida que fácilmente puede disfrutarse, seas o no fan del superhéroe, pero a la que termina por faltarle un desenlace que haga justicia al desarrollo inicial de la trama y a la evolución de los personajes.