Italia, campiña romana, siglo XVII
Con la llegada de la luna negra, la magia ha descendido a la Tierra. Ade ha descubierto que es una bruja, pero se siente perdida.
La mejor herramienta para conocerse es El libro de los reinos y la sabiduría de sus revelaciones.
Cuando acude a sus páginas en busca de sus orígenes, encuentra mucho más de lo que esperaba, un pasado al que ni ella ni sus compañeras del aquelarre pueden evitar enfrentarse.
Mientras aprenden juntas a dominar los nuevos poderes mágicos, tendrán que prepararse para la gran batalla que las espera contra la temible amenaza de los Furiosi —hechiceros que se han rebelado contra la Diosa— y, por supuesto, contra la Santa Inquisición y los benandanti, liderados por el joven Pietro. Unido a Ade por una fuerte atracción, él también emprenderá un viaje para conocer su auténtica identidad y su destino, del que le resultará difícil escapar.
Porque el odio es un sentimiento tan fuerte como el amor, tan delicado como la gota que esculpe la roca o tan perturbador como el ímpetu destructor de una tormenta.
Una vida mágica
Tras la muerte de sus padres, Gato vive a la sombra de su hermana Gwendolen, cuyas habilidades mágicas despiertan la admiración de todo el mundo. Una bruja mediocre cuida de ambos hasta que se trasladan al castillo del poderosísimo mago Chrestomanci. Allí, una serie de complicaciones harán que uno de los dos acabe en un universo paralelo y el otro se vea envuelto en una conspiración de hechiceros.
Las vidas de Christopher Chant
Descubrir que tiene nueve vidas y que va a ser el próximo Chrestomanci altera los planes de Christopher: él preferiría dedicarse a recorrer en sueños tierras habitadas por sirenas, dragones, gatos coléricos y diosas de lo más peculiares. Pero pronto comprende que es muy difícil escapar del destino, en especial cuando alguien conocido como el Fantasma amenaza con alterar el orden de los mundos...