Como te contábamos a principios de año, Oriol Canosa y Daniel Hernández Chambers han sido los galardonados en la última edición de los premios Ala Delta y Alandar, respectivamente. En enero se anunciaron los ganadores, y el pasado jueves pudimos ver los libros ya publicados y escuchar a los autores hablar de su obra en una rueda de prensa celebrada en el Museo ABC de Madrid.
En la categoría infantil, Oriol Canosa, autor de La casa del profesor Kürbis, Apa! y Polos opuestos, se hizo con el premio Ala Delta por su novela El islote de los perros, ambientada en Estambul. Nos contó que escuchó la leyenda de estos perros tras una temporada viviendo allí y decidió mezclarla con otros personajes reales y ficticios para dar vida a la novela.
En el caso de de la categoría juvenil, el premio Alandar de año se lo lleva Daniel Hernández Chambers gracias a su obra Miralejos. Es autor de El enigma Rosenthal, la saga El legado de Olkrann o El secreto de Enola (obra ganadora del Premio Ala Delta el año pasado) y en esta ocasión nos cuenta la historia de Julio, un chico que un día recibe de regalo un pequeño catalejo a través del cual empezará a ver el mundo, llevándolo hasta un tesoro inesperado. En la rueda de prensa nos dejó caer que se trataba de una novela bastante coral, ambientada en un pueblo cualquiera del sur de España. El autor junta ya más de veinte títulos, aunque este es su segundo galardón en temática juvenil, tras recibir en 2012 el Premio Juvenil Everest.
También pudimos contar con la presencia de Vicenzo del Vecchio y Marino Amodio, ganadores del VI Premio a Álbum Ilustrado, que todavía no podremos encontrar en librerías. No obstante, ya sabemos que se llamará Terráneo y que estará ambientado en una isla ficticia que ocuparía el enclave del Mar Mediterráneo.
Esa misma tarde tuvo lugar el acto de entrega de los premios y, como cada año, la editorial Edelvives lo celebró con una fiesta por todo lo alto. En este caso, reunió a cuatro monologuistas: Anabel Alonso, Luis Piedrahita, Iñaki Urrutia y Diego Arjona, en el espacio Meeu de la estación de Chamartín. El lema de este año, «entre líneas», unía libros y trenes, y en torno a esos temas giraron los monólogos de la noche, intercalados con apariciones de los autores ganadores de los premios.
Desde El Templo queremos dar la enhorabuena a los premiados y dejarte enlazada la entrevista que le hicimos a Daniel Hernández Chambers en nuestro número 29.