El martes 15 de septiembre, la editorial Destino nos convocó en el EAE Business School de Madrid para presentarnos las novedades de este último trimestre del año. El evento comenzó con un saludo de Jennifer Niven, autora de Violet y Finch, una novela que enamoró a la editora Irene Lucas.
A continuación, tanto Irene como Elisabet Roura, responsable de comunicación, hablaron de Las crónicas de Magnus Bane. Debido a que la autora se había retrasado en la entrega de Lady Midnight, el primero de la saga The Dark Artifices, la editora decidió darle una oportunidad a la historia de Magnus tras leerla y darse cuenta de lo buena que era.
Después, descubrimos la portada española de El guante de cobre, la segunda parte de la saga Magisterium, escrita por Cassandra Clare y Holly Black. Después del emocionante giro que tomó la historia de Callum, Aaron y Tamara al final del primer libro, ¡estamos deseando leer este!
Acto seguido, nos mostraron un vídeo del autor de La princesa de hielo fuego, Svend Morthens, el cual creó bastante curiosidad porque no mostraba su cara «por seguridad».
También pudimos contar con la presencia de Chris Pueyo, autor novel que publica su primera novela, titulada El chico de las estrellas. Irene se deshizo en halagos hacia esta historia, que calificó como «rompedora». Por su parte, el autor nos confesó que jamás pensó en llegar a publicar y rompió a llorar a la hora de contarnos cómo surgió esta novela.
Llegado el momento, Destino nos sorprendió anunciando que próximamente publicarán poesía, comenzando con los poemas de Carlos Miguel Cortés, autor del libro Intranerso. Para ponernos los dientes largos, sortearon dos poemas inéditos del autor.
Por otro lado, nos desvelaron que el sello Espasa va a publicar no ficción y empezará con una biografía ilustrada de Steve Jobs hecha por Jessie Hartland.
Como broche de oro, nos hablaron de la segunda parte de Endgame, La llave del cielo, trilogía escrita por James Fray y Nils Johnson-Shelton. Al igual que la primera parte, esta también contiene un cuantioso premio que estará esperando a aquel que desvele el enigma de esta novela. Por cierto, si aún estás intentado desentrañar el misterio del primero, desiste. Ya hay ganador: un astrofísico.
Al finalizar, organizaron un divertido juego en el que había que contestar varias preguntas, resolver acertijos y buscar una carta por la sala para ganar unos libros de la editorial. Un ameno final para una tarde en la que la literatura no dejó de brillar.