Para muchos supersticiosos este 2013 puede resultar un año de mala suerte, pero no para Jordi Sierra i Fabra. Si hace unas semanas anunciábamos que el autor catalán había sido galardonado con el quinto Premio La Galera Jóvenes Lectores, ahora nos complace informar que ha sido el ganador de la décima edición del Premio Anaya de Literatura Infantil y Juvenil con la novela Parco.
El jurado, que este año ha contado con la colaboración de un miembro de nuestra revista, R. A. Calle Morales, estuvo presidido por la última ganadora, la autora Blanca Álvarez, y compuesto por distintas personas del mundo literario, como Concepción Pardo (ayudante de las Bibliotecas Municipales de Fuenlabrada), Pilar Pérez (librera de El Dragón Lector), María Luisa Blanco (asesora de Literatura Infantil y Juvenil de Anaya) y Pablo Cruz (editor de Anaya Infantil y Juvenil). Decidieron, por unanimidad, conceder este galardón a Parco por «la originalidad de la estructura, que muestra el mundo interior del protagonista y sus luchas internas».
El premio, dotado con dieciocho mil euros, recibió noventa y cuatro originales de distintos países como España, Alemania, Bélgica, Estados Unidos, México y Argentina.
La obra, dirigida a jóvenes de quince años, no saldrá a la venta hasta abril. Y a falta de una sinopsis oficial, tenemos las palabras de su creador, que la define así: «Parco es un grito. Parco es una historia diferente, al límite, afilada, cortante como una cuchilla, contundente, directa, un pulso en tiempos oscuros, en el que las voces de los indignados se elevan por encima del miedo. Y es también la historia de uno de nosotros, marginal, real, situada en el extremo de una vida. Una historia que arranca en un reformatorio, con un joven asesino, un misterio y una esperanza que solo se presenta al final, en el último suspiro, la última voz. Por el camino, el miedo, la angustia de un mundo desesperado que busca sin encontrar, con un personaje cuyo nombre no aparece en ningún momento. Porque Parco es uno y son muchos».